domingo, 28 de febrero de 2010

Manos

Fias?
No, más que frias. Heladas.
En ese momento era lo único frio...
Mis dedos no permanecian impasibles, ni ese momento, ni en aquel otro.
Extrañaba aquella sensación. El nerviosismo de la cercanía, de tanta cercanía me inquietaba.
El roce de mis dedos, el tacto de su piel...
Heladas, pero con la sangre a punto de ebullir.

4 comentarios:

  1. Dent May... buen descubrimiento, gracias ;):)

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  2. curioso... yo he tenido las manos frías y esa misma sensación de recordar cosas olvidadas mediante el tacto este fin de semama...
    besos

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  3. nena,no words.
    Los dedos son esos extrañas prolongaciones del cuerpo que,en ocasiones,son pura pasión.

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  4. lo de las manos frías y sudosas tiene que tener una explicación médica coherente, seguro ¿cómo es posible si la sangre hierve por dentro?

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¿Qué piensan el resto de locos?...